¿Qué pasa si no corro un maratón?
30/04/2014
Pues no pasa nada, absolutamente nada. Vivimos en una época donde parece que lo importante es cruzar una meta, y mientras más lejos esté de la salida, incluso mejor. Estamos viviendo la que podría llamarse la era de los maratones, medias maratones, ultratrails, ironman… Aquello tan antiguo del más rápido, más alto, más fuerte, sigue de moda.
Parece que lo más importante es bajar de ciertas marcas, o ser capaz de superar un desnivel acumulado de no sé cuánto en menos tiempo y sin parar. Pues no, los beer runners no tenemos este punto de vista. Creemos que si no corres un maratón puedes ser un corredor inmensamente feliz. Igual de feliz que uno que corre dos al año; si no consigues un dorsal para ese ‘ultra’ de ciento y pico kilómetros en plena sierra también puedes tener una vida plenamente activa y saludable (posiblemente más)… Parafraseando al entrenador Vujadin Boskov, recientemente fallecido, al igual que “fútbol es fútbol”, para nosotros ‘correr es correr’.
No es cuestión de tener que recorrer los míticos 42.195 metros de una tacada para demostrarte que eres un corredor auténtico. Eres un corredor auténtico cuando disfrutas corriendo: más rápido o más lento, bajo la lluvia o con un día primaveral de buena temperatura, en montaña, parque, tierra o playa... Correr, para los que no somos profesionales, es un placer. No necesitamos etiquetas que nos definan en clases. Que sí, que correr maratones es genial, pero no esencial.
Con el paso del tiempo uno se da cuenta de que la esencia es llegar a mayor corriendo, la constancia, la persistencia, el placer. No hay nada mejor que salir a correr sin estrés, el tiempo que quieras, da igual que sean 40 minutos o una hora y media, y volver a hacerlo al día siguiente, y al otro, y al otro…
Si sales a correr y luego no tienes fuerzas para comentar el entrenamiento con tus compañeros, muy posiblemente es que no merezca la pena. Piénsalo. ¿Qué momentos han sido más placenteros desde que corres? ¿Cuándo estás en la línea de salida nervioso y asustado? ¿Cuándo te chocas con el muro en el kilómetro treinta y tantos?¿Cuándo conseguiste que tu amigo se apunte a correr contigo por primera vez?
Cumplir objetivos también es esencial para los corredores, pero por favor, disfrutad. Probad a correr sin móvil, sin cronómetro o gps, sin dorsal, sin pensar en cuántos kilómetros tenéis que correr. Probad a correr por sensaciones, hasta que estéis cansados.
Probad a volver a los orígenes, a disfrutar, a correr. Y, cómo no, brindaremos en el bar por lo bien que nos lo hemos pasado.