El peso, enemigo principal cuando corremos

En la evolución natural de cualquier corredor está esa fase (normalmente a los pocos meses de empezar a entrenar) en la que todos, y especialmente, tus familiares, te dicen eso de “¡te estás quedando muy delgad@!”. Los cambios estéticos en nuestro organismo son muy visibles a poco que te tomas el running en serio. 

De todas formas, aquí no te vamos a hablar sobre los beneficios que tiene sobre tu salud tener un peso adecuado, pero sí de cómo el exceso de kilos puede afectarte negativamente en tu rendimiento cuando quieras correr más rápido, o incluso el riesgo de lesión que conlleva este ‘equipaje’ extra.

Normalmente, con el mero hecho de llevar una dieta saludable y con salir a correr habitualmente controlaremos nuestro peso. Pero si ingieres más calorías de las que gastas día a día irás sumando gramos a tu cuerpo, y si buscas mejorar marcas o cumplir con retos exigentes como terminar un maratón, un trail… también te supondrá una dificultad añadida.

 

Lo del peso ideal para correr depende de cada uno, de su nivel, de sus expectativas, pero sí que hay evidencias que mientras menos pesamos, mejor rendimiento podemos tener. Eso sí, en el lado extremo, una rápida pérdida de peso se traduce en problemas de salud: cansancio, falta de fuerza… e incluso lesiones.

Si lo nuestro es la larga distancia debemos vigilar nuestro peso, pero más allá de obsesionarnos con alcanzar una cifra en la báscula, lo que debemos es alimentarnos bien y entrenar conforme a nuestro nivel. En pleno siglo XXI no hay ninguna duda sobre lo trascendente que puede ser para nosotros como corredores ponernos en manos de un entrenador cualificado, así como recibir pautas de un nutricionista. La alimentación siempre es clave en la vida de un deportista y, aunque nosotros no seamos profesionales, elegir bien alimentos de calidad y reducir en lo posible los kilos de más nos librarán de lesiones y nos harán correr más rápido.

En primer lugar, nuestra musculatura será capaz de movernos más rápido por el asfalto si le quitamos peso de encima. En segundo lugar, nuestra musculatura y articulaciones sufrirán menos impactos, reduciendo el riesgo de lesión, el estrés y el cansancio. 

¿Cómo medir cuántos segundos mejoraría por kilómetro si pierdo 1 kg? Lamentamos decirte que no hay una fórmula exacta, aunque sí estudios que confirman que a menos peso, más velocidad y menos cansancio (lee más aquí: https://www.vitonica.com/running-1/perder-peso-te-hace-corredor-rapido-cuantos-segundos-ganas-cada-kilo-perdido)

Los ‘veteranos’ en esto suelen decir que un kilo menos suele traducirse en casi 2 segundos menos por kilómetro en una carrera de 10k-21k. Pero esto no es una verdad universal ni es ciencia exacta. Es muy complicado mantener el equilibrio entre tener una masa muscular óptima, un bajo nivel de tejido graso, una vida saludable, rendimiento deportivo, darnos algún capricho o poder tener unos hábitos razonablemente placenteros a la hora de comer… Y, para colmo, nuestra vida cargada de obligaciones, horarios y estrés no ayuda para nada.

En definitiva, intenta cuidarte, no te obsesiones con el peso, entrena y escucha los mensajes que tu organismo te llama, y antes de hacer locuras ponte en manos de auténticos especialistas para mimar tu cuerpo. Que sólo tenemos uno y lo que queremos es correr muchos años más y divertirnos haciéndolo.